Disfrutando la ciudad de Frutillar
Ubicada en la ribera del Lago Llanquihue, en la Región de Los Lagos, esta ciudad de tradición germana y de bellos paisajes se ha vuelto uno de los destinos favoritos de aquellos que buscan conocer los encantos de la zona sur del país. Su arquitectura colonial de influencia alemana, su cultura musical, su gastronomía y su tranquilidad hacen de esta ciudad una experiencia en sí misma.
A continuación te presentamos algunas de las actividades y lugares de Frutillar que no puedes pasar por alto si buscas sacarle el provecho a tu visita:
Emblema de la ciudad de Frutillar, el Teatro del Lago fue inaugurado en 2010 con el propósito de alojar las Semanas Musicales de Frutillar, tradición que se lleva a cabo en la ciudad desde 1968. A la fecha ha alojado a diversos orquestas y músicos de alto prestigio internacional, además de contar con un programa educativo que le ha permitido a miles de estudiantes perfeccionarse musicalmente.
Junto con tener un fuerte rol a nivel cultural, el teatro también llama la atención por su particular arquitectura, que mezcla estructuras modernas con diseños clásicos de la ciudad, y que además ofrece una vista privilegiada del Lago Llanquihue y el Volcán Osorno.
Abierto al público desde 1984, este lugar fue creado con el propósito de plasmar y recrear la vida de los inmigrantes y antepasados de la ciudad durante sus primeros años en Chile. En total las 3 hectáreas de este museo alojan cuatro edificaciones turísticas, junto a un jardín de fuertes influencias alemanas.
La “Casa del Molino” es una de las principales, cuyo mayor atractivo es la gran y antigua rueda de paleta para moler trigo, movida por el agua del canal; este edificio también aloja diversos objetos de importancia histórica. Los otros edificios son conocidos como la “Casona de Campo”, la “Casa del herrero” y el “Campanario”, todas construidas con madera y con un diseño de carácter germano.
La influencia de sus inmigrantes no solo se ha visto reflejada en sus construcciones y estructura, sino que también en su deliciosa gastronomía. Si bien es posible disfrutar de la clásica preparación que es el “kuchen” en diferentes ciudades del sur, Frutillar es reconocida por ofrecer una gran variedad de sabores, en los cuales mezclan lo mejor de la cultura alemana y la chilena.
Monumento a los Colonos Alemanes
Ubicado a 4 kilómetros de la ciudad y sobre la cima de un cerro, este monumento fue construido por los descendientes de los primeros alemanes en llegar a la zona, quienes además grabaron los nombres de sus familias en una roca del monumento que hasta la fecha pueden ser leídos.
Este lugar resulta atractivo para los visitantes por la impresionante vista que ofrece del Lago Llanquihue y los tres volcanes que lo rodean.
Es imposible visitar Frutillar sin realizar un paseo por la orilla del Lago Llanquihue, recorrido que ofrece disfrutar de diversos íconos de la ciudad.; incluyendo el Templo Luterano de Frutillar, construido entre 1929 y 1934, y reconocido por ser el único Monumento Histórico de la ciudad.
Otros elementos clásicos y disfrutados por visitantes son sus esculturas en forma de llave de sol y el piano al aire libre, reflejos claros de la importancia que tiene la música para este lugar. Pero sin lugar a dudas, el lugar más popular es el muelle, desde donde se obtiene una vista única hacia el Volcán Osorno.
Fuente This is Chile